Todos escucharon mientras la voz clara de Elrond hablaba de Sauron y los Anillos de Poder y de cuando fueron forjados en la Segunda Edad del Mundo, mucho tiempo atrás. Algunos conocían una parte de la historia, pero nadie del principio al fin, y muchos ojos se volvieron a Elrond con miedo y asombro mientras les hablaba de los herreros elfos de Eregion y de la amistad que tenían con las gentes de Moria y de cómo deseaban conocerlo todo y de cómo esta inquietud los hizo caer en manos de Sauron.

Unas dudillas

Iniciado por Melkor, 09 de Enero, 2009, 02:36:04

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Feänor

Por Eru como vamos a ser un enano y yo la misma persona?
Cuadno digo que los valar no pueden concebir el mal, corrigeme si me equivoco porque estoy bastante pegao en Tolkien ahora mismo, los valar eran partes de la conciencia de Eru, digamos q uno era la conciencia medioambiental, otro los vientos, bueno un poco asi, y en algun sitio me suena que diga que no podian ver más alla de lo que eru les habia dado a cada uno, y en algun momento se me hace recordar que perdonaban a morgoth porque de verdad pensaban que se habia arrepentido.
Como veras mi aprecio hacia los valar tiende exponencialmente a cero.
Un saludo y disculpa la cantidad de chorradas que haya podido cometer y decir
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"Busca la espada quebrada que está en Imladris; habrá concilios más fuertes que los hechizos de Morgul."

Melkor

Es cierto, no se parecen en nada (tal vez en lo obstinados que pueden llegar a ser).

Sí, tienes razón: "Porque no había mal en Manwë y no podía comprenderlo, y sabía que en el principio, en el pensamiento de Ilúvatar, Melkor había sido como él; y no veía las profundidades del corazón de Melkor y no advertía que el amor lo había abandonado para siempre." Cuando te hice la pregunta no había analizado este fragmento bien, y además, si no has leído "El poder de Melkor-Morgoth" te insto a que lo hagas. Son unos escritos de Tolkien en los que analiza excelentemente su concepción del mal en su mitología.
quot;Pero lo que en verdad deseaba era someter tanto a Elfos como a Hombres, pues envidiaba los dones que Ilúvatar les había prometido; y él mismo deseaba tener súbditos y sirvientes, y ser llamado Señor, y gobernar otras voluntades."